Con el cambio social que estamos viviendo, los centros educativos comienzan a detectar la necesidad de
plantearse o adaptar el sistema de enseñanza a las nuevas necesidades de sus alumnos y alumnas.

La educación emocional, en tiempos de pandemia, se hace más necesaria que nunca como una forma de
promoción de la salud mental y con el objetivo de mejorar el desarrollo de las habilidades emocionales para la
gestión de la incertidumbre y la cooperación. Para el desarrollo de habilidades intra, inter y transpersonales, se
hace cada vez más necesaria la formación del profesorado, con el objetivo de que puedan ir incorporando nuevas
herramientas de acompañamiento y, por supuesto, favorecer el propio conocimiento antes de poder transmitirlo. Y
también por no perder la perspectiva de la importancia de las familias en el proceso educativo de sus hijos e hijas,
desde un enfoque sistémico, y teniendo en cuenta las necesidades y características de cada una dentro del
aprendizaje del alumnado.

Esta actividad formativa consta de dos sesiones presenciales de 4 horas de duración y una tarea sencilla de
aplicación al aula de los contenidos abordados. Debe realizarse entre la 1a y la 2a sesión.