Saltar al contenido
Imagen representativa de la sección de A Fondo

A fondo

Itinerarios lectores. Una propuesta para la atención a la diversidad

EEI Viento del Sur

La integración inclusiva del alumnado con NEAE y el reto de la comprensión lectora.

Itinerarios lectores. Una propuesta para la atención a la diversidad
 
María Deseada Mula Gómez. Maestra de Pedagogía Terapéutica. EEI. Viento del Sur (Cádiz)
 
Lo esencial es invisible a los ojos. Antoine de Saint-Exupéry
 

En la actualidad, el conjunto del profesorado aboga por la integración inclusiva del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo. Si bien es cierto que al mismo tiempo demanda los recursos humanos y materiales necesarios para llevar a cabo dicho proceso de integración con las garantías, calidad y rigor necesarios.

Pero cuando tales recursos escasean, a menudo nos preguntamos cómo trabajar en el aula atendiendo a la diversidad. La respuesta está en crear los mejores contextos para facilitar aprendizajes, abriendo ventanas y puertas donde antaño estaban los muros. Estos contextos posibles no serán los ideales, los que soñamos contando con las condiciones adecuadas. Se trata, pues de hacer lo mejor con aquello que está en nuestras manos. Desde esta filosofía, crearemos dinámicas de trabajo más amplias y veremos cómo vamos cambiando lo que pensábamos que no podíamos modificar.

La inclusión educativa es un camino arduo. Tener alumnado con NEAE en nuestras aulas puede llevarnos a muchos docentes a dudar de nuestras propias capacidades. Puede ocurrir que estemos empleando estrategias que necesitan determinadas competencias del alumnado y, al enfrentarnos a un alumnado que carece de ellas, nos bloqueemos en el quehacer diario al darnos cuenta de que la brecha entre este último y el resto se va haciendo cada vez más amplia.

Muchas veces, en la historia de la Educación Especial, para favorecer el acceso de la lectura y la escritura del alumnado con NEAE se ha optado por repasar los métodos de enseñanza de primer ciclo, mezclando y alternando variantes del método fonético y del global. Y hemos visto cómo, en ocasiones, se fracasaba en el intento pues no se alcanzaba así la pretendida comprensión lectora, ya que esta no se deriva sin más del proceso de decodificación.

En otras ocasiones, cuando creíamos que el niño o la niña que teníamos delante no iba a captar el mensaje de un determinado texto original, nos hemos decantado por ofrecerles otro texto, una simplificación, una historia “disminuida”. Pero tampoco así hemos logrado nuestro propósito de que alcanzaran la comprensión lectora.

Por eso quisiera que nos paráramos a hablar de cómo acercar la literatura a estos niños y niñas cuyas necesidades específicas de apoyo parece colocarles el cartel de “paso cerrado” al imaginario literario.

Ante este panorama, elevemos nuestras expectativas porque, como decía el Principito, “lo esencial es invisible a los ojos”. Inventemos ideas o, mejor dicho, vamos a reinventarnos como cuentacuentos. Iniciemos un camino, un itinerario en el que nos sumerjamos en un libro.

Los cuentos sensoriales

Pero que sea el libro y las sensaciones que este despierta lo que primero salga a pasear. Nuestra primera propuesta para superar el reto son los cuentos sensoriales.

Introducirnos en una historia supone estar dentro, no como meros espectadores, sino como personajes principales. Para que la imaginación nos haga sentir, primero nuestros sentidos se deben poner en marcha.

Un cuento sensorial supone crear el máximo de experiencias reales. Junto a las palabras, tanto orales como escritas, ejemplos visuales (en relieve, si la discapacidad es visual), sonoros, táctiles, gustativos y olfativos.

El alma de una historia va más allá del conjunto de palabras que la componen. Importa el tono, la intensidad con la que la contemos. Importa -y mucho- si el viento se convierte realmente en viento o la lluvia llega de alguna forma hasta nuestra piel, si el césped está ahí o si el sol evoca un momento vivido previamente. Si hay abrazos, demos abrazos. Si vuelan, volemos… La rosa del Principito no es rosa si no la sentimos, si no la tenemos para olerla. Solo así comprenderemos por qué fue tan importante el tiempo que pasó con ella.

Por lo tanto, ¿un clásico puede ser una historia sensorial? La respuesta es un rotundo sí. Es posible y nos permite llegar a vivenciar capítulos importantes, interesantes y cargados de aprendizajes para el alumnado. Las historias sensoriales nos permiten llegar a todos y a todas, tanto a quienes ya pueden imaginar con la palabra como a quienes aún necesitan apoyos previos para simbolizar, haciendo propias las vivencias que los libros nos transmiten. Dicho de otra manera: atender a la diversidad desde esta perspectiva ayuda a acercarnos a rincones no siempre probados, conectando con todos y cada uno de los niños y niñas a quienes van dirigidas las historias.

Los cuentos motores

Un paso más allá serían los “cuentos motores”. Hemos trabajado con nuestro alumnado la creación de cuentos a través del movimiento. Este inventar kinestésico primero nos informa sobre su centro de interés. Posteriormente, y de forma progresiva, introducimos variables y añadimos elementos. ¿Y si esta historia tiene también los personajes hechos en arcilla o plastilina? ¿Y si más tarde crean en formato de papel su historia? ¿Y si lo encuadernamos? ¿Y si se los contamos a otras personas? ¿Y si se convierten sin más en pequeños grandes escritores o pequeños grandes cuentacuentos? Veamos un poco más sobre “cuentos motores”.

La dificultad de mantener la atención del alumnado en el aula es una batalla habitual para el profesorado. Despertar la curiosidad de los niños y niñas ante nuestras lecturas o hacia sus propias incursiones literarias y que mantengan en ellas su atención durante un determinado tiempo se hace realmente difícil. Salta inmediatamente su inquietud motora. Pues vamos a aprovecharla. Contemos cuentos respetando esta realidad y estableciendo pausas para situarnos. Si Mauro se cae de un árbol… ¿Cómo podríamos crear una sensación motriz similar? ¿Una pelota gigante enorme, que asemeje la rama del árbol antes de romperse? ¿Unas lanas para enmarañarse el gorro despeluchado?... Tratemos de transformar un aula, una biblioteca, un centro en espacios en movimiento.

Ahora que ya conocemos el planteamiento de los cuentos sensoriales y motores cabe preguntarse quiénes pueden contarlos. Pues todo el mundo, porque personajes podemos ser cualesquiera de nosotros. Profesorado, alumnado y familias, haciendo uso de la biblioteca del centro, formamos parte de este proceso de animación a la lectura. Porque escuchar un cuento no es sólo un acto auditivo: es poder convertir en sueños internos las historias de otros. Y a la inversa, hacer que nuestros sueños internos formen parte de la vida de los demás. Como diría Jimmy Liao: “esconderse en un rincón del mundo”.

Algunos títulos para trabajar con historias sensoriales o motoras

Cualquier libro puede servirnos de base para crear situaciones sensoriales o motóricas.

Podemos comenzar con los más pequeños (3 – 6 años) con los libros ilustrados de la colección Osito Mauro, de David Melling, editados por Edelvives, y continuar por la colección El fabuloso Mateo (6 – 8 años), de Daniel Monedero, en la misma editorial.

Propuesta para la atención a la diversidad: Mauro

Algunos ejemplos de historias que nos facilitan trabajar los valores de la inclusión pueden ser: Por cuatro esquinitas de nada, de Jérôme Ruillier;  Un libro de Herve Tullet.; El libro negro de los colores de Menena Cottin y Rosana Faría; El cazo de Lorenzo de Isabelle Carrier.

Un cuento es un soporte, un lugar dónde inventar unas sensaciones, unas ideas, una filosofía de vida. Reconocernos en los personajes y que ellos nos den las imágenes que nos alivien, nos alegren o nos permitan comprender el mundo externo. Estos libros cuasi silenciosos -¿Los cuentos deben estar llenos de letras o pueden darse historias sin ellas?-, donde la palabra no es la protagonista, nos darán la posibilidad de ir introduciendo progresivamente el lenguaje oral.

Se trata, en fin, de acercarnos a una sociedad en la que todos los niños y niñas puedan acceder a la literatura. Ese es el objetivo. 

 

Buscador Destacado

También te puede interesar

Mostrando 1 a 4 de 28 enlaces 1 2 3 4 5
Nodo: sv0205.ced.junta-andalucia.es
Ir al inicio