Recursos Manipulativos - Plan de impulso al razonamiento matemático
El currículo andaluz para las etapas de Educación Infantil, Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria, en los Decretos 100/2023, 101/2023 y 102/2023, de 9 de mayo, por los que se establece la ordenación y el currículo de las etapas de Educación Infantil, Educación Primaria, Educación Secundaria Obligatoria en la Comunidad Autónoma de Andalucía y en las Órdenes de 30 de mayo (Infantil, Primaria y ESO) que los desarrollan, ponen el acento en la comprensión y en la capacidad de abordar racionalmente los problemas. Podemos encontrar diferentes referencias, tanto de forma explícita como implícita, sobre el uso de material manipulativo, en el desarrollo de las competencias específicas así como en sus criterios de evaluación e incluso asociadas a algunos saberes básicos.
El 18 de junio de 2024 se publicaron las Instrucciones de la Viceconsejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, sobre las medidas para el Fomento del Razonamiento Matemático a través del planteamiento y la resolución de retos y problemas en Educación Infantil, Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria. Uno de los ejes de este plan fomenta el desarrollo de metodologías manipulativas para acceder al aprendizaje. Por ello, se propone introducir materiales manipulativos para facilitar la comprensión de conceptos matemáticos. Este tipo de materiales se consideran una herramienta para convertir los conceptos abstractos de las matemáticas en experiencias tangibles.
En estas instrucciones, como orientación didáctica y metodológica, se propone una pauta general de tratamiento para nuevos tipos de problemas, que sugiere seguir una secuencia que parta desde un planteamiento oral del mismo, seguido de un abordaje manipulativo que ayude a comprender nuevos conceptos y activen la predisposición y motivación para el aprendizaje. Este paso no es algo imprescindible, sino que supone un andamiaje que podrá usarse, o no, en el camino hacia el trabajo simbólico y algorítmico.
El uso de materiales manipulativos en las aulas de matemáticas cuenta con un sólido respaldo en la investigación pedagógica. Este enfoque busca sustituir los métodos mecánicos e irracionales de enseñanza-aprendizaje por procesos más competenciales y reflexivos. Cabe destacar, en este enfoque, la importancia de la mediación y la colaboración para superar las brechas entre lo que el alumnado puede hacer de manera independiente y con ayuda.
Además, se enfatiza el desarrollo progresivo del conocimiento, desde la manipulación de objetos concretos hasta el pensamiento abstracto, delimitando etapas esenciales en el aprendizaje. De este modo, se pretende promover la enseñanza de aprendizajes matemáticos complejos mediante materiales manipulativos que permitan un aprendizaje menos rígido y semiestructurado.
Este proceso de aprendizaje comienza con la manipulación de objetos físicos, seguido con representaciones gráficas y culminado en la abstracción, asegurando así un entendimiento profundo y estructurado. Esto, además, permite conectar los nuevos conocimientos con los ya existentes, produciendo así un aprendizaje significativo.
De esta manera, este enfoque evita el aprendizaje repetitivo y promueve una integración profunda y contextualizada del conocimiento, empleando imágenes, símbolos, objetos o conceptos como puentes cognitivos. La confluencia de estas ideas resalta la necesidad de metodologías activas y adaptativas que integren de manera coherente los diferentes aspectos del aprendizaje, contribuyendo a un desarrollo integral y significativo en las aulas de matemáticas.
Se crean guías de uso de material manipulativo para realizar algunas propuestas didácticas sobre el uso de los materiales manipulativos que se han remitido a los centros educativos. Estas propuestas deben considerarse ejemplos, y como tales, una posibilidad dentro de una enorme variedad de usos. Para poder centrar mejor cada propuesta para el uso de cada material, se aporta a cada ejemplo una concreción curricular que, de forma prioritaria con ese enfoque -no exclusiva-, aborda el desarrollo de una competencia específica para un nivel educativo; y dentro de la misma utilizará algunos saberes básicos.
En cualquier caso, el uso de los materiales está al servicio del desarrollo de los diferentes procesos matemáticos que se detallan en las competencias específicas, y trasciende el aprendizaje aislado de los saberes básicos; es a través del planteamiento de los procesos matemáticos como abordamos el aprendizaje de los contenidos o sentidos matemáticos, y no al revés.