María Valverde Ledo. Jefa del Departamento de Educación Plástica Visual y Audiovisual del IES Galileo de Alhaurín de la Torre (Málaga)

El libro alterado es un canal muy interesante para introducir al alumnado en el mundo de la creación artística. Es importante matizar que el libro alterado es un tipo de libro de artista, pero la diferencia radica en que la intervención se realiza en un libro ya editado, (haciendo asimismo de esta una experiencia de reciclaje).

Este proyecto se lleva a cabo en la asignatura de  Educación Plástica Visual y Audiovisual con el alumnado de primero de ESO del IES Galileo de Alhaurín de la Torre (Málaga) y se realiza desde el curso 2011-2012 con resultados muy satisfactorios.  Además, se coordina con la Biblioteca y puede participar el Departamento de Biología.

En esta sociedad, donde la cultura del “usar y tirar” sigue estando muy presente, se da por hecho que la vida útil de los objetos que nos rodean es muy corta. Con esta experiencia se insta al alumnado a pensar en la posibilidad de que los objetos pueden llegar a tener más de una vida útil y más de una función.

El hecho de utilizar libros, que se presupone que “solo“ sirven para ser leídos, hace que el alumnado se replantee ideas preconcebidas sobre los objetos, alterándolos desde su propia imaginación para conseguir crear algo bello (o no) que pueda ser admirado por otras personas como una obra de arte (el reciclaje como forma de expresión).

Este tipo de proyecto podría hacerse extensible a cualquier curso de Secundaria, e incluso  a los últimos cursos de Primaria.

En Secundaria, el nivel más idóneo es 1º de ESO puesto que el alumnado en general posee mayor creatividad y, aunque comienza a tener prejuicios y bloqueos artísticos, aún goza de soltura para poder llevar a cabo este tipo de actividad, favoreciendo el desarrollo de la  creatividad.

El proyecto en sí trata de darle un nuevo uso a los libros o revistas que han quedado obsoletos, ya sea por su temática o el propio estado del libro. Se usan libros y revistas de la biblioteca, de los propios estudiantes o de cualquier persona que quiera cederlos.

El proceso se divide en las siguientes fases:

•  “¿Qué es?”: introducción sobre el tema.
• “¿Qué hago?”: investigación y toma de decisiones.
• “¿Cómo lo hago?”: desarrollo y finalización del proyecto.

Para la primera fase el profesor les da unas pautas mínimas para el desarrollo del proyecto, les explica qué es un libro alterado, les enseña ejemplos de diferentes artistas y les expone el problema que deben solucionar: alterar un libro.

Durante la segunda fase, la más compleja, los estudiantes deben decidir qué hacer desde el punto de vista artístico. Se les recomienda que comiencen a partir de una idea propia, del título o argumento del libro que se va a alterar o, (los que pueden ser menos creativos), de un homenaje a un artista ya dedicado a este tipo de libros, “copiando” una de sus obras.

En cuanto a desarrollarlo a partir de una idea propia, es muy importante que partan desde algo que les guste o les apasione, por ejemplo un hobbie o deporte, puesto que es mucho más fácil de abordar para ellos.

También es importante que tengan claro lo que quieren (y pueden) hacer. Que vayan decidiendo sobre la marcha lo que quieren hacer suele ser negativo en el resultado, por eso se les recomienda que hagan bocetos y especifiquen los materiales.

En la tercera fase el alumnado experimenta con los materiales y técnicas (tantos como quiera o pueda: cola blanca, témpera, hilo, lápices y rotuladores de colores, papel metalizado, papel charol, etc.).

Durante todo el proceso, el profesor debe ayudar a encaminar el trabajo del estudiante, sobre todo a la hora de empezar, puesto que lo primero que tiene que decidir el alumno es lo que quiere hacer, y, a partir de ahí, ir decidiendo qué tipo de libro o revista le interesa utilizar y los materiales para llevarlo a cabo.

Ese primer momento, que es el más complicado para los estudiantes, es en el que el docente debe encauzar al alumno hacia las ideas más acertadas. Una vez elegida la idea, hay que escoger el libro y los materiales para poder desarrollarla con éxito. En este momento el docente debe indicar el camino a seguir, que en cada alumno será diferente.

Este proyecto favorece la atención a la diversidad puesto que parte desde el conocimiento del propio estudiante, de sus capacidades y de su creatividad, y se amolda a sus necesidades, marcando el alumno sus propios límites. Además, promueve la diversidad como algo positivo, la socialización y la resolución de problemas que puedan surgir a la hora de llevar a cabo el proyecto, que favorecerá al alumno haciéndole pensar en distintas posibilidades para solucionar los problemas y saber elegir la más correcta para dicho momento.

La elección y uso de diferentes materiales y herramientas específicas hace que se desarrolle su conocimiento, ampliando así las enseñanzas de forma individualizada. Además se intenta fomentar el cooperativismo y aprendizaje entre iguales, puesto que los alumnos y alumnas explican a los otros cómo han conseguido diferentes efectos y soluciones, reforzando así el aprendizaje de quienes lo explican y ampliando el conocimiento de quienes escuchan.

Una vez terminados, los libros alterados se exponen en la Biblioteca, coincidiendo con el día del libro, 23 de abril. Además, la Biblioteca posee una colección permanente sobre dichos libros, que se puede disfrutar durante todo el año.

La exposición hace que los estudiantes sean conscientes de lo que es el arte, sin necesidad de usar materiales caros, y así concienciarlos sobre la importancia del reciclaje, consiguiendo crear objetos artísticos.