Las TIC y la destreza oral

Estefanía Aguayo Jiménez | IES Sácilis, San Pedro Abad (Córdoba) Alumna UNED1

INTRODUCCIÓN

El estudio de la expresión y comprensión oral en cualquier lengua son objetivos pedagógicos fundamentales que deben tenerse en cuenta, ya que permiten instaurar en el alumnado una serie de herramientas y habilidades que son útiles en su vida futura. Expresarse y comprender oralmente de una forma correcta garantiza el aprendizaje de una capacidad con fines sociales de éxito, así como el desarrollo de un espíritu crítico que nos ayudará a potenciar las relaciones sociales. En palabras de Garavito (2014:8):

La expresión oral es una estrategia necesaria y fundamental en los seres humanos que ha tenido un papel fundamental en el desarrollo de todos los grupos sociales a nivel mundial; si se tiene en cuenta que todas las culturas han desarrollado múltiples aspectos dentro del campo político, religioso, académico, económico, entre otros, a partir de ella; por lo que es evidenciada como una de las habilidades mínimas de cualquier ser humano para facilitar la  interacción  que cada individuo tiene con el medio que lo rodea.

En esta línea, Arnáez (2009:296) estudia el aprendizaje de la oralidad teniendo en cuenta el doble proceso de las destrezas relacionadas con la expresión y la comprensión, ya que como expone en su obra, el aprendizaje “debe entenderse en la doble vertiente que supone la competencia oral, tanto la comprensión de lo que alguien dice (escuchar) como la producción de lo que se quiere decir (hablar)”. Todo proceso oral se mueve teniendo en cuenta una didáctica de retroalimentación entre “el decir y el escuchar”, y es que como argumentaba Lomas (2002) en sus estudios sobre lectura comprensiva, esto muestra un reflejo de la relación intrínseca que se establece entre las destrezas orales señaladas (expresión y comprensión).

Tradicionalmente, en la didáctica de las lenguas se han clasificado las cuatro destrezas conocidas según el modo de transmisión. Así, se habla de destrezas orales y destrezas escritas aunando la expresión y comprensión oral, por un lado, frente a la expresión y comprensión escrita, por otro. Sin embargo, es interesante señalar, ya que justifica la orientación que rige esta investigación, que en ocasiones y en congruencia con la clasificación universalmente conocida, se habla de una destreza de carácter mixto, la de la “interacción oral”, para referirse a aquella que activa simultáneamente e indisociablemente la expresión y la comprensión oral, es decir, el acto de producir y entender oralmente para lograr un proceso comunicativo eficaz y satisfactorio. Reforzamos esta idea con la visión de Hernández (2007), que define en su estudio el término “interacción” como un proceso en el que el alumno habla teniendo en cuenta lo que ya se ha dicho y ya se ha comprendido con anterioridad, siendo capaz de continuar conversando a partir de turnos de palabras. Dicho de otro modo, en todo proceso de intercambio comunicativo la expresión y comprensión de la lengua es indispensable, ya que, como refleja la autora anteriormente citada, las destrezas orales centradas en la expresión y comprensión actúan como verdaderas protagonistas en la adquisición de las lenguas.

Hilando con lo anterior, me surgen importantes interrogantes sobre si las metodologías tradicionales han desarrollado un trabajo suficiente en la enseñanza de estas destrezas, o bien si metodologías más innovadoras y la inclusión de las nuevas tecnologías podrían mejorar el aprendizaje de las mismas. 

La enseñanza de las destrezas orales suele abordarse en su aprendizaje alejada de los contextos cercanos del alumnado y se continúa trabajando con mucha frecuencia a través de metodologías tradicionales aisladas de la concepción y forma de entender el mundo por parte del alumnado. Si se trabaja una destreza, en este caso, la oral, participando de la interacción oral defendida en párrafos anteriores, el sujeto de análisis, en este caso, el alumnado, debe conocer el ambiente que le rodea para que el aprendizaje de esta destreza provoque un resultado significativo. Por ello, como apunta Ramírez (2002), más que hablar y escuchar debemos apostar por participar en contextos y situaciones que rodeen el ámbito de los sujetos, que les hagan negociar y conseguir actuaciones y negociaciones de éxito en su propia vida. Por ello, siguiendo a Pinilla (2010), pensamos que al hablar de expresión oral, y adelantándonos en este caso a las tareas del aula, se deben tener en cuenta tanto las situaciones comunicativas de expresión como aquellas otras en las que un mismo interlocutor puede adoptar los papeles de emisor y receptor, desarrollando las habilidades de comprensión al unísono de la expresión.

En este sentido, resulta muy interesante investigar esta parcela y focalizar el entrenamiento de estas destrezas con nuevas metodologías que impliquen el uso de las TIC. Es evidente que la participación cada vez más masiva de las nuevas tecnologías en instrumentos que fomentan las destrezas orales ayuda a mejorar este panorama pedagógico y hace necesaria la modificación de los objetivos que rigen la enseñanza del discurso oral, orientado actualmente a las plataformas como herramientas de enseñanza. Ya al comienzo del siglo XXI, Ramírez (2002:15) afirmaba que “el enfoque comunicativo, la pragmática y los medios tecnológicos estaban contribuyendo de modo muy significativo a su desarrollo educativo”, del mismo modo que Vallorani (2011), hace una década, aludía al concepto de “cultura electrónica” para justificar la influencia de los nuevos medios de comunicación e innovaciones tecnológicas en el texto escrito y hablado. Por ello, debemos propiciar al alumno un medio nuevo, que resulte cercano y que le facilite el aprendizaje de la oralidad tan necesaria en su vida a partir del trabajo en paralelo con las destrezas orales.

LAS TIC Y LA DESTREZA ORAL

Las TIC han supuesto una revolución en todos los campos de estudio, ya que suponen una gran ayuda en la enseñanza en general, aportando interactividad, innovación y variedad, entre otras características.

En el terreno de la didáctica de la expresión y/o comprensión oral, el concepto de digitalización nos acerca al término “inclusión” del texto oral y digital en la enseñanza (Ávalos, 2014), lo que supone adaptarnos a los medios de comunicación nuevos y hacerlos cercanos al nuevo receptor de la misma manera que desarrollar la habilidad de comprensión de los medios seleccionados a partir de una serie de estrategias concretadas en tareas para trabajar la expresión que buscamos mejorar. El aprendizaje actual de la oralidad a partir de herramientas digitales conecta con los cambios en la enseñanza de las lenguas, por lo que la pedagogía debe ser modificada en la misma línea. Hoy en día vivimos una globalización asimétrica que debe respaldar en todo momento nuestro trabajo y no desorientarnos, usando los escritorios online como herramientas de planificación y guías para llegar a la misma meta, centrándonos, pues, en enseñar la oralidad, pero desde diferentes posturas respaldadas actualmente por las TIC, vistas como canales de difusión y cooperación adecuados para el aprendizaje de la oralidad (Adell, 2004). Internet en la educación (opus cit.) muestra una serie de proyectos modelo que permiten mostrar este medio no solo como un mosaico informativo sino como un espejo de resultados, de publicaciones, de difusión, de cooperación e interacción. 

En este campo, Gutiérrez, Tabasso y Fernández (2016) muestran en su obra una visión enriquecedora sobre este tema que nos ayuda a decantarnos por la enseñanza TIC en las destrezas orales al presentar la innovación, tanto de la metodología como del docente, de la misma manera que muestran la necesidad de abogar por la funcionalidad de las nuevas tecnologías para lograr un uso adecuado y aprovechamiento de los beneficios que aportan en la enseñanza de la oralidad. La inmediatez y la interactividad son premisas características, por lo que sería necesario “humanizar” todos los aspectos que envuelven a los medios tecnológicos y verlos desde cerca como una ventaja en la enseñanza, siempre y cuando funcionen desde la regulación, control y funcionalidad, requisito inherente y característico de Symbaloo, la herramienta central de este trabajo de investigación. 

«La digitalización en la enseñanza de las destrezas orales debe buscar potenciar la capacidad de seleccionar y trabajar actividades de expresión y comprensión con los medios tecnológicos que propicien un resultado de aprendizaje significativo».

La digitalización de la enseñanza es un cambio en la forma de aprendizaje que ha transformado el panorama actual. En relación con ello, es interesante rescatar las apreciaciones de Gónzalez (2016) que trayendo a colación ideas de otros autores señala cómo la red ha modificado el proceso de aprendizaje, y por ello, la pedagogía, lo cual lleva al docente a reflexionar y amoldarse al nuevo escenario educativo: educar en el nuevo contexto tecnológico e instaurar competencias que permitan al alumnado el filtrado de la información. Es evidente que las nuevas tecnologías ofrecen información en abundancia. Como destaca Gimeno (2001:70): “La Red por sí sola se convierte en conocimiento generalizado, algo que no le había ocurrido, ni de lejos, a la biblioteca”. Por ello, se debe entrenar la capacidad de llegar a saber más en relación con las nuevas tecnologías y por ello apelar al sujeto del conocimiento. “Lo que nos permiten los ordenadores e ingenios telemáticos es descargarnos de las tareas rutinarias información, almacenarla y -en alguna medida- organizarla y procesarla” (González, 2016:23), por lo que la digitalización en la enseñanza de las destrezas orales debe buscar potenciar la capacidad de seleccionar y trabajar actividades de expresión y comprensión con los medios tecnológicos que propicien un resultado de aprendizaje significativo en este terreno, que complementen y superen limitaciones de enfoques anteriores.

Es sorprendente el hecho de que Ruiz y López (2004) ya presentaban un panorama general respecto a la mejora de la enseñanza a partir de una metodología digital años atrás, lo cual permite partir de este estudio para hacer buen uso de la exposición de los principales aspectos pedagógicos de esta innovadora metodología en el área de las lenguas extranjeras y de la muestra de resultados obtenidos a través de dicho análisis.  

El nuevo aprendizaje centrado en la oralidad a partir de las TIC permite trabajar distintas destrezas y habilidades desde múltiples enfoques, por lo que los entornos digitales y redes personales de aprendizaje son desde una perspectiva pedagógica grandes opciones de trabajo para cobijar actividades que potencien el aprendizaje de la oralidad. Díaz (2015) resume en su obra cómo las nuevas herramientas ayudan a mejorar y enriquecer el panorama educativo y da una serie de consejos que profundizan en la funcionalidad de los instrumentos TIC como medio de aprovechamiento. La autora reclama una transformación de fondo que llevaría a cabo una revolución en el campo de la enseñanza propiciándose así procesos de aprendizaje que buscarán instaurar conocimientos y herramientas en el alumnado para potenciar un aprendizaje de larga vida. 

CONCLUSIONES

Autores como Skeham (2001) proponen principios que nos han ayudado a ilustrar el aprendizaje de las destrezas que venimos estudiando. En concreto, el autor concreta cinco:

- Seleccionar una serie de estructuras claves en las actividades 

- Seleccionar tareas que se ajusten al criterio de utilidad (tareas auténticas, del mundo real). 

- Seleccionar y secuenciar tareas para lograr el desarrollo balanceado del objetivo. 

- Maximizar las oportunidades de centrarse en las formas a través de la manipulación atencional. 

- Usar ciclos de respuestas.

Estos cinco principios deben ser considerados premisas clave en el campo de la expresión y comprensión, ya que si la selección de tareas es adecuada, se produce el desarrollo óptimo de toda prueba comunicativa abordado desde la función del hablante o del oyente. De nuevo hay que reiterar que, para que se cumpla la efectividad como premisa, es de capital importancia profundizar en la idea de que enseñar a los alumnos en su propio escenario de vida será lo que provoque un aprendizaje significativo durante toda su trayectoria, es decir, que se cumpla el requisito básico de toda comunicación en relación con las estrategias citadas.

De esta forma lo defiende Aparici (2011), que dedica su obra a hablar de la importancia de las prácticas interactivas basadas en la dialogicidad y cómo las tareas en relación con las TIC favorecen su adquisición y formación a lo largo de toda la vida del estudiante. En esta misma línea, Magadan (2014) defiende el diálogo como el puente que permite mostrar cómo la comunicación es eficaz y efectiva en todos los aspectos y es el reflejo de que la oralidad ha sido realizada con éxito.

La incursión de las nuevas tecnologías en la enseñanza de la oralidad ha cambiado el modo de abordar el proceso de enseñanza. Es indiscutible que nos enfrentamos a un nuevo panorama de aprendizaje dibujado como una “mutación constante” (Parrilla, 2008), donde el aprendiz está gobernado por la informática; de ahí la necesidad de regular el filtro de uso en los nuevos medios de comunicación y realizar un registro de dichas actividades desde una perspectiva diferente. Un objetivo fundamental sería dotar al estudiante de una serie de habilidades que le conecten, en este caso, con el entorno digital. Existe un nuevo código en la comunicación, el web, donde la hipertextualidad y la interactividad actúan como relaciones persistentes. 

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1 Trabajo de investigación tutelado por Noa Talaván Zanón, profesora de la UNED

 

Referencias bibliográficas

Adell, J. y Castañeda, L. (2010). Los Entornos Personales de Aprendizaje (PLEs): una nueva manera de entender el aprendizaje, en R. Roig Vila y M. Fiorucci (Eds.), Claves para la investigación en innovación y calidad educativas. La integración de las Tecnologías de la Información y la Comunicación y la Interculturalidad en las aulas. Alcoy, Marfil – Roma TRE, Universita degli studi.

Garavito, D.M.(2014). Estrategia didáctica para el mejoramiento de la expresión (Tesis de Maestría, Universidad de Colombia). Recuperado a partir de http://repository.unilibre.edu.co/handle/10901/7570

González-Díaz, C., Iglesias-García, M., Baeza, V., y Martín Llaguno, M. (2016). Ideas para el diseño del repositorio de la Red Teoría y Práctica de la Comunicación, en XIV Jornadas de Redes de Investigación en Docencia Universitaria. Nuevas estrategias organizativas y metodológicas en la formación universitaria para responder a la necesidad de adaptación al cambio organizadas por el ICE (Universidad de Alicante).

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Vallorani, C. M. (2011).La oralidad tecnológica digital. Estudio pragmático-comunicativo sobre la oralidad en el audiolibro (Tesis doctoral, Universidad de Alicante). Recuperado a partir de https://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/19656/6/cecilia_vallornari.pdf

Zhindón-Duarte, J. (2018). Las TIC como elemento innovador en la enseñanza-aprendizaje, aplicación de Symbaloo Lesson Plans (Tesis doctoral, La Universidad en Internet). Recuperado a partir de https://reunir.unir.net/handle/123456789/7006

Documento completo "El aprendizaje de la destreza oral a partir de las Tic. Introducción teórica".