MES DE DANZA 24

ESTRENO ABSOLUTO

Creación e interpretación: Laura Morales y Miguel Marín Música: Miguel Marín.

YA HABITUAL EN NUESTRO ESCENARIO, MIGUEL MARÍN EN COMPAÑÍA DE LA BAILARINA LAURA MORALES, NEGOCIAN MÚSICA Y MOVIMIENTO.

En la pasada edición del Mes de Danza de Sevilla las bailarinas Roser Tutusaus y Laura Morales junto al músico Miguel Marín presentaron A full life of rivers and icy mountains dentro del programa work-in-progress desafiando el vacío de una vida que, llena de todo, te deja únicamente con los suspiros de lo que fue y convenciéndote de una muerte vertical.

Los últimos meses han estado cargados de proyectos para ambos; Miguel Marín se ha encontrado en constante gira por todo el mundo con la Cia. GN & MC mientras que Laura Morales ha vuelto de su experiencia como coreógrafa internacional residente en el American Dance Festival en Durham (Carolina del Norte) y del Movement Research de Nueva York y ha recibido el premio a “ una bailarina sobresaliente” en el Certamen Coreográfico de Madrid. Ahora, casi un años después, vuelven a unirse para estrenar en esta edición del Festival Mes de Danza de Sevilla en el Teatro Central, A full life rivers and icy mountains.

En este proceso deciden afrontar el frío más gélido y mas contundente sin conmoverse ni sentirse aturdidos. Paralelo es la modalidad escogida para la final de esta competición entre ríos y montañas heladas, entre el vacío y la muerte vertical. Una esquiadora que realizará un descenso en paralelo y que sólo ganará si es capaz de no conmoverse ni producir calor, negociando con Miguel Marín los tiempos y las distintas rutas, el aguante y la entereza, los engaños y el disfrute.

Después del trabajo previo que la bailarina Laura Morales ha estado haciendo en el American Dance Festival con el coreógrafo Jesse Zaritt sobre los distintos estados, negociaciones y necesidades del performer solo practise, Laura y Miguel (acompañados de Benito Jiménez, en el diseño de luz) han decido continuar con la idea de la competición consigo mismo para abandonarse al desafío, incluso sintiendo por momentos que tu cuerpo lo lleva otra persona, de una vida que te ha dejado sin nada, pero llena de todo.