Los centros de día que atienden a personas en situación de dependencia en Andalucía vuelven poco a poco a la normalidad, recuperando unos niveles de ocupación similares a los registrados antes de la pandemia, y alcanzan ya el 61,3%. En su comparecencia en la Comisión del Parlamento, la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, ha detallado los resultados del plan para centros de día, que se puso en marcha para impulsar la actividad en estos recursos que atienden a personas mayores y personas con discapacidad.

La consejera ha explicado que la pandemia causó el descenso del número de personas usuarias que asisten a estas instalaciones, aunque los datos de evolución de la ocupación evidencian el inicio de la recuperación. Esta situación se ha producido sobre todo en los centros de día para personas mayores, pues se trata del grupo de población que ha resultado más vulnerable al coronavirus, y que ha tenido que restringir su actividad diaria fuera de sus domicilios.

Para paliar esta situación, la Junta de Andalucía aprobó el pasado mes de abril una medida de priorización de las propuestas del Programa Individual de Atención (PIA) para tramitar con carácter preeminente aquellos expedientes que tienen como resultado la prescripción de este recurso, así como la tramitación del expediente de aquellas personas que, siendo atendidas a través de este servicio, se encuentran a la espera de su resolución en el ámbito de la dependencia (independientemente del orden de incoación de los mismos).

La ocupación de los centros de día para personas mayores alcanzó como consecuencia de la pandemia un nivel de ocupación del 54,76%. Tras seis meses desde la puesta en marcha del plan de priorización, a fecha actual, la ocupación media en estos centros es de 61,13%, es decir, se ha incrementado en más de 6 puntos. Este nivel de ocupación se encuentra a tan solo unos puntos porcentuales de la ocupación registrada a final de 2018, en la anterior legislatura.

La situación ha sido diferente, sin embargo, en los casos de los centros de día y centros ocupacionales para personas con discapacidad, en los que el descenso de la ocupación no ha sido tan acusado. En la actualidad, estos centros tienen niveles de ocupación similares a los de antes del inicio de la crisis social y sanitaria (83,6% y 81,1% respectivamente).

“Los centros de día son unas instalaciones fundamentales en la atención de las personas dependientes, que ayudan a mejorar su calidad de vida y potenciar su autonomía, pero también son una herramienta básica para la prevención: para evitar que esa dependencia se agrave o esa autonomía lograda sufra retrocesos”, ha recordado Ruiz.

Además, la Consejera ha recordado el lanzamiento de la campaña informativa “La emoción de volver” con la que “hemos querido incentivar el regreso de nuestras personas mayores y con discapacidad a los centros de día, enviando un mensaje de tranquilidad a nuestros mayores y a las personas con discapacidad. También a sus familiares, ya que su regreso es nuestra mayor satisfacción”.

Desde que se inició la crisis, desde la Consejería se han puesto en marcha numerosas medidas económicas extraordinarias para los centros de día, a fin de garantizar la financiación de las plazas concertadas ocupadas por personas beneficiarias en situación de dependencia. Además, y con carácter retroactivo desde el 1 de enero, se han revisado los costes máximos de plazas con un incremento general del 2,6%.

Ruiz ha enmarcado estas medidas en el compromiso de su departamento para garantizar la atención a las personas beneficiarias en situación de dependencia, asegurando la calidad de los servicios, el sostenimiento de las entidades prestadoras de los servicios dirigidos a la atención de personas mayores y personas con discapacidad y, en consecuencia, el mantenimiento del empleo del sector.

“Nuestro objetivo desde que llegamos a esta Consejería fue implantar un modelo de proximidad y cercanía, para que las personas dependientes pudieran disfrutar de la atención que merecen lo más cerca posible de su entorno”, ha subrayado Ruiz, “un modelo de atención a la dependencia de calidad y sobre todo de calidez, adaptado a las necesidades de estas personas y que hemos podido blindar al presupuestar la mayor dotación económica para atención dependencia de la historia de Andalucía, con 1.741 millones de euros”.