Ifapa y ACRIMON firman un convenio para valorizar y diferenciar productos de la raza Montesina

IFAPA
Rebaño ovejas Raza Montesina
Oveja Montesina

El Ifapa y la Asociación Nacional de Criadores de oveja Montesina (ACRIMON) han firmado un convenio de colaboración con objeto de valorizar las funciones que esta ganadería realiza en los territorios donde se ubica y también, diferenciar y valorizar los productos que proceden de la misma.

Las explotaciones vinculadas al ovino de raza Montesina siguen utilizando los recursos disponibles en el medio ligados al pastoreo como principal base de su alimentación, originando un vínculo muy alto con el territorio del que depende, por tanto, su día a día. Por otro lado, cada vez más aparecen consumidores que demandan alimentos procedentes de sistemas pastorales, y no solo por la calidad nutricional de los mismos, sino también por la protección medioambiental que realizan y el alto bienestar animal de sus rebaños.

El acuerdo suscrito por el presidente de la Asociación, D. Antonio Romero, y el presidente del Ifapa, D. José Cara, el pasado 3 de diciembre, va a ejecutarse en 3 fases: una primera en la que se va ha realizar una categorización de los aspectos agroecológicos con los que trabajan los ganaderos y ganaderas de esta raza, una segunda etapa en la que definir un producto final que será el cordero Montesino de pastoreo, y finalmente, en una tercera fase, se pondrá en  valorar el papel que estas ganaderías realizan en la multifuncionalidad de los territorios donde se establecen.

El convenio se gestionará a través del proyecto de investigación y transferencia “Retos de los sistemas ganaderos andaluces y sus productos (RESGAP)” que es coordinado por el organismo de investigación y formación de la Junta de Andalucía desde su centro de Granada.

La Asociación de la raza Montesina está formada por 24 ganaderías, la mayoría de ellas en Andalucía, pero también en Castilla La Mancha y Murcia, con un censo total de 10.353 reproductores. Esta raza catalogada por el Ministerio de Agricultura como raza Amenazada se enfrenta a los problemas derivados del cambio climático y la disminución de la fertilidad de los territorios donde pastorea, junto a la no diferenciación de su producto y al escaso reconocimiento del desempeño medioambiental que estos animales realizan.