El dióxido de nitrógeno (NO2) es un gas pardo-rojizo, no inflamable y tóxico que se forma, principalmente, por la oxidación atmosférica del monóxido de nitrógeno producido en los sistemas de combustión.
El origen del dióxido de nitrógeno puede ser natural, y se da en procesos biológicos de suelos, en las tormentas, y por la oxidación del monóxido de nitrógeno natural.
En cuanto a las fuentes antropogénicas, la oxidación del nitrógeno presente en el aire y en el combustible durante los procesos de combustión a alta temperatura, así como la fabricación de ácido nítrico y diversos procesos de nitración industrial son las más importantes.
La fuente principal de NO (óxido nítrico) antropogénico en zonas urbanas es la oxidación incompleta del nitrógeno atmosférico en los motores de combustión interna, y por ello, en dichas áreas los automóviles son los principales culpables de las emisiones de este contaminante.
En el caso de las exposiciones agudas, solo las concentraciones muy altas afectan a las personas sanas. Los niños expuestos a los mismos niveles que los adultos pueden recibir dosis mayores porque tienen una mayor relación superficie pulmonar/peso. Además, pueden estar expuestos a mayores niveles de dióxido de nitrógeno debido a su corta estatura y que los niveles más altos de dióxido de nitrógeno se encuentran más cerca del suelo.
La exposición a concentraciones atmosférica altas puede producir irritación e inflamación conjuntival. La sintomatología de obstrucción bronquial puede desarrollarse días o semanas después de una exposición grave.
Los pacientes sufren malestar, debilidad, fiebre, escalofríos, disnea, tos, pudiendo llegar a presentar una patología respiratoria severa.
- Nivel de dióxido de nitrógeno alto (> 560 μg/m3, media horaria durante 3 horas consecutivas) Por encima de estos niveles de superación, se esperan efectos sobre la salud en las personas especialmente sensibles con enfermedades respiratorias crónicas, como asma, EPOC, enfisema pulmonar, etc. y niños por lo que deben evitar realizar actividades al aire libre.
- Nivel de dióxido de nitrógeno muy alto (> 1800 μg/m3, media horaria durante 3 horas consecutivas) Por encima de estos niveles de superación, se espera que aumenten los efectos graves sobre la salud entre las personas especialmente sensibles. Cualquier persona debe evitar actividades prolongadas al aire libre.
La fuente principal de dióxido de nitrógeno es la combustión de combustibles fósiles como petróleo, carbón o gas natural. Por ello son característicos de áreas urbanas e industriales. Las emisiones más importantes corresponden a los vehículos (la combustión de gasoil produce 40 veces más óxidos de nitrógeno que la de gasolina) y a las centrales térmicas. También contribuyen las incineradoras, las refinerías, las fábricas de vidrio y las cementeras. Las calderas de gas natural también lo pueden generar.
Estrategia de reducción de la contaminación por dióxido de nitrógeno:
- Limitación del tráfico en las concentraciones urbanas
- Control y regulación de las condiciones de funcionamiento de ciertas industrias