
Actualmente la influencia de las actividades humanas se deja notar en la práctica totalidad del medio natural. Estos usos o influencias repercuten en la evolución natural de las comunidades vegetales, ya sea por el aprovechamiento exclusivo de los recursos como por la transformación o eliminación de la cubierta vegetal para usos agrícolas, industriales o de urbanización.
Podemos decir que la vegetación potencial de un territorio es la que se instala en él como resultado de una serie de procesos naturales en ausencia de actividades humanas o catástrofes naturales.
Podemos consultar la vegetación potencial en el territorio andaluz a través de la aplicación sobre la vegetación desarrollada por la REDIAM: