El río Chíllar, un punto de distinguido exotismo en la Axarquía

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12 de mayo de 2022 - (Espacios protegidos, Biodiversidad, Agua)

La acción del agua ha creado un cauce entre espectaculares paredes verticales y generando una flora y fauna poco habituales en el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama

La acción del agua ha creado un cauce entre espectaculares paredes verticales y generando una flora y fauna poco habituales en las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.

La malagueña comarca de la Axarquía es uno de esos ejemplos de zona de Andalucía cuya gran variedad de paisajes distintos llama la atención por estar en una superficie no demasiado extensa. Baste decir que en sus poco más de 1.000 kilómetros cuadrados podemos encontrar tres espacios naturales declarados que son de gran interés: el Paraje Natural de los acantilados de Maro-Cerro Gordo, el Parque Natural de los montes de Málaga y el Parque Natural de las sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, compartido con la provincia de Granada.

Este último, declarado Parque Natural en noviembre de 1999, es un impresionante macizo montañoso que va desde la vegas de Alhama de Granada hasta la misma orilla del Mediterráneo en la localidad de Nerja. Entre los ocho pueblos de la provincia de Málaga que alberga se encuentran Nerja, Frigiliana y Cómpeta por cuyos términos municipales discurre la sorprendente ruta del río Chíllar, que nace en la sierra de Almijara. Buena parte de la ruta, tal vez la más espectacular, se desarrolla sobre el cauce del propio río y entre altas paredes de piedra caliza, las mismas que el agua ha ido erosionando hasta crear un desfiladero, tan estrecho en ocasiones que se asemeja más a un pasillo del que se pueden tocar las dos paredes a la vez sin apenas extender los brazos: los cahorros.

El interés turístico de este sendero por sí mismo es indudable, pero los valores naturales de esta zona del parque son dignos de ser tenidos en cuenta. No es de extrañar que la flora sea más propia de ambientes húmedos y, por tanto, se diferencie claramente de la de otras zonas del Parque Natural de las sierras de Tejeda, Almijara y Alhama dándole, además, un distinguido toque exótico. En las orillas del río llaman la atención los abundantes palmitos y también se muestran numerosos cañaverales, juncales, adelfas y helechos, habituales en las zonas ribereñas. 

Eso sí, conforme la influencia más intensa del discurrir del río va perdiendo fuerza aparecen las plantas más propias del bosque mediterráneo: romero, zarza, brezo... Tampoco faltan árboles típicos de este hábitat, como el pino carrasco, asentado en las zonas de arenal nacidas de la descomposición del mármol, el algarrobo o la higuera, que se hacen los amos cuando ya el ambiente no está determinado por la corriente de agua.

Si hablamos de la fauna, las circunstancias del río Chíllar -la fuerza con la que baja, su procedencia y escaso recorrido...- hacen prácticamente imposible que se vean peces, ya que no son las mejores condiciones para su reproducción. Sí es posible la presencia de culebras de agua y de anfibios tales como el sapo partero y el tritón pigmeo.

En cuanto a las aves, si hablamos de flora típica de ribera de río también tenemos que tenerlo cuenta ahora. Así, en el mismo cauce suele anidar el chorlitejo chico y en los márgenes se encuentran especies como la lavandera boyera, el carricero común, el zarcero bereber, y el ruiseñor común o mirlo común, entre otros. De nuevo vuelve a ponerse de manifiesto la fuerte influencia del río, ya que hay que alejarse algo para, en el entorno, toparse con otras aves (collalba negra, la curruca cabecinegra, el pinzón o el cernícalo).

También hay mamíferos como el zorro, la gineta, el jabalí, la ardilla o el tejón y entre los muchossenderistas de la zona los hay que aseguran que en contadas ocasiones se pueden ver ejemplares de cabra montés, sin duda procedentes de las zonas más al norte del parque.

Además de la mencionada declaración como Parque Natural, otras figuras de protección adornan este lugar. Es Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA, 2002) y, más recientemente, Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Conservación (ZEC) de la Red Natura 2000. Además, Reserva Andaluza de Caza.

De las rutas que tienen al río Chíllar como objetivo, Nerja, en la costa, es protagonista en todas, ya que es siempre punto de partida o de llegada. De esta manera, es habitual encontrar servicios de atención e información para el visitante, así como gran variedad de empresas que ofrecen excursiones y todo tipo de actividades tanto en la sierra de Almijara como en toda la costa e incluso en el cercano paraje natural de las calas de Maro-Cerro Gordo. Frigiliana y Cómpeta, en el interior, completan el trío de poblaciones moriscas que comparten el río y las rutas que llegan hasta ellas son, por más extensas, una buena ocasión para comprobar in situ toda la densidad de elementos que ofrece la naturaleza en esta comarca de Málaga.