Uno de los principios orientadores de la actuación de los poderes públicos es el impulso de los instrumentos adecuados para hacer compatible el desarrollo de la actividad económica con la adecuada calidad ambiental de un determinado espacio.

Un mecanismo voluntario puede definirse como un planteamiento estratégico asumido por los sectores implicados, para alcanzar los objetivos en materia de medio ambiente, mediante la colaboración y asociación con las empresas, por parte de la Administración.

Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, se viene impulsando este tipo de planteamientos estratégicos que, al margen de las obligaciones legales derivadas de la normativa vigente, buscan hacer de la sociedad andaluza una sociedad más concienciada e implicada en la valoración y protección del medio ambiente.

En esta Comunidad Autónoma se desarrollan los siguientes instrumentos voluntarios para la mejora ambiental, definidos en el Título V de la Ley 7/2007, de 9 de julio, de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental.