0.5
0.4
0.3
0.2
0.1
NDVI
Dic
Ene
Feb
Mar
Abr
May
Jun Jul
Fuente:
Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.
Red de Información Ambiental de Andalucía, 2013.
10/11
05/06
Media 97/12
98/99
11/12
04/05
97/98
IVM densa
media(1997-2012)
IVM dispersa
media(1997-2012)
sep-12
0,40
0,46
0,33
0,34
ago-12
0,41
0,44
0,33
0,33
jul-12
0,41
0,46
0,33
0,35
jun-12
0,43
0,50
0,36
0,38
may-12
0,50
0,51
0,43
0,42
abr-12
0,51
0,52
0,44
0,44
mar-12
0,52
0,53
0,45
0,45
feb-12
0,55
0,53
0,48
0,45
ene-12
0,60
0,54
0,52
0,46
dic-11
0,60
0,54
0,52
0,45
nov-11
0,58
0,53
0,50
0,43
oct-11
0,55
0,50
0,44
0,39
Fuente:
Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente. Red de Información Ambiental de Andalucía, 2013.
Medio Ambiente en Andalucía
128
res máximos de la serie histórica, debido a la inercia de la
vegetación tras dos periodos pluviométricos buenos (2009-2011),
y a que las precipitaciones acaecidas hasta noviembre de 2011 son
similares a las de la media mensual de la serie histórica.
En el mes de enero se observa un repunte del índice, a pesar
de que el volumen de precipitaciones ya aparece muy por de-
bajo de la media. Sin embargo, la escasez de precipitación no
es limitante para que se produzca la brotación de hojas nuevas
en el arbolado, incluso puede inducir un adelanto de la brota-
ción que lo explicaría.
Ya en Febrero, se empiezan a notar los efectos de la ausencia de
precipitaciones (desde diciembre 2011), así se observa un des-
censo brusco de los valores del índice de vegetación, llegando
en el mes de abril a registrar valores en torno a la media de la
serie histórica (1997-2011) para ambas formaciones, mantenien-
do cierta estabilidad hasta finales de mayo como respuesta de
la vegetación a un pico de precipitaciones en el mes de abril
(similar a los valores de precipitaciones de la serie histórica). A
partir de ese momento el descenso de los valores de NDVI será
continuo llegando a mínimos al final del verano en el caso de
la vegetación natural densa, y en torno a los valores medios de
la serie para las formaciones naturales dispersas y pastizales.
De esa manera, a partir del mes de febrero se da un claro cam-
bio en la tendencia normal de la respuesta de la vegetación
respecto a la serie histórica, mostrando síntomas de decai-
miento, que se agravan con el mantenimiento de la situación
de déficit hídrico de los meses sucesivos, por lo que puede
empezar a hablarse de anomalías negativas del índice frente a
la media histórica, para la vegetación natural.
A modo de resumen, las formaciones naturales muestran un
máximo histórico (1997-2012) del NDVI en el mes de enero que
desciende situándose en torno a la media en el mes de abril, y
acercándose en el mes de Septiembre a mínimos de la serie. La
oscilación es acusada, y la recuperación depende de la evolu-
ción de los meses sucesivos.
El caso de los cultivos herbáceos en secano
Los resultados que se presentan a continuación se obtienen a
partir de las estadísticas del índice de vegetación medio para el
grupo de cultivo (herbáceos en secano), cultivos de mayor in-
terés en la primera mitad del año agrícola, y nos permiten
conocer como se ha desarrollado el año, así como comparar el
estado de la vegetación cultivada entre el año en curso y años
anteriores. Los resultados se plasman en el gráfico superior que
nos muestra la evolución de esta cobertura vegetal.
En el caso de los cultivos en régimen de secano, a pesar de su
naturaleza resistente al estrés hídrico, una situación de sequía
pluviométrica provoca una gran merma en la respuesta de los
valores de índice de vegetación respecto a lo esperado. Sin
embargo, no tienen una relación única con la cantidad de
lluvia anual caída. Depende también de otros factores como las
temperaturas en relación con los diferentes momentos del ciclo
vegetativo de los cultivos. En cualquier caso, lo más importan-
te de la pluviometría no es la cantidad sino el momento en el
que cae, teniendo especial importancia las lluvias en la nas-
cencia y en ámbitos mediterráneos, las lluvias primaverales.
Si analizamos los resultados que se muestran en el gráfico,
podemos ver como el inicio del año 2011-2012 está favorecido
por las precipitaciones del otoño y la suavidad de las tempe-
raturas, que han beneficiado la nascencia de los cultivos de
invierno y un posterior desarrollo óptimo, de ahí que los valo-